EL CASCANUECES, Tchaikovsky y  La 5ª SINFONÍA, Beethoven

La genialidad de Tchaikovsky y la fuerza de Beethoven llegan estas Navidades al Palacio Euskalduna, el 25 de diciembre. El mundo de la infancia, la magia y la fantasía se combinan en la primera parte del programa con la suite de El Cascanueces de Tchaikovsky, el ballet navideño por excelencia. En esta versión para concierto, que se estrenó y alcanzó la fama incluso antes que el propio ballet, son inolvidables el romántico Vals de las flores, la vigorosa danza rusa o el original sonido de la celesta dando voz al hada de azúcar.

El programa del concierto se completa con la Sinfonía nº 5 de Beethoven, una partitura que se asocia perfectamente a la imagen que solemos tener del músico, agitado, intenso y despeinado, y que mejor representa la grandeza de la música. Las cuatro notas que abren la sinfonía, y que se van repitiendo a lo largo de la obra, son seguramente las notas más populares de toda la música ya que evocan el toque a una puerta, la “del destino”.

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